Pero, ¿algo falla verdad?, sí, algo falla, en presencia del programa de superdeportivós de la BBC, Top Gear, el Bugatti Veyrón super sport llegó al los 431 Km/h mientras el el Hennessey solo llega a los 427,6 km/h, pero el Bugatti tiene la velocidad límitada por el gran desgaste de las gomas de los neumáticos mientras que el Hennessey no, así pues el Venom GT se convierte en el modelo de producción más rápido.
Las gomas no parecen ser problema para el Hennessey Venom GT que, con un propulsor V8 de 7,0 litros y 1.200 CV, anuncia una velocidad máxima de 447 km/h. Por el momento, no ha llegado a semejante marca, aunque no nos cabe duda que es el siguiente paso lógico para quitarle el trono definitivamente al Veyron Super Sport. Lo extraño es que, a estas alturas de la película, no haya contraatacado el SSC Ultimate Aero, quien disfrutaba del título del más rápido del planeta hasta la llegada del Veyron Super Sports.
